19 de enero de 2010

LA FOTO DEL AÑO


Hay acontecimientos que conmueven el alma. Fenómenos tan devastadores como el ocurrido en Haití, con un terremoto sin precedentes que ha asolado a gran parte del país, parecen sacados de un film del que el mundo está siendo testigo a través del testimonio diario de cientos de informadores. Si tuviéramos que quedarnos con una imagen que resuma la hecatombe, me quedaría con ésta. Refleja la realidad y simboliza a la perfección una tragedia con letras mayúsculas. Gracias al trabajo diario de cientos de voluntarios, como este bombero español que sacó de los escombros a este niño de 2 años, no sólo resulta encomiable sino que merece el reconocimiento de la sociedad en general; el de un mundo superficial y acostumbrado no pocas veces a mirarse el ombligo. El mundo civilizado frente la pobreza más absoluta, el primer mundo frente a la nada...; una nada que demasiados aprovechan para mejorar su imagen pública mientras a los oprimidos, a los excluidos sociales que viven aquí cuesta siquiera hacerle un leve guiño. Con todo, AYUDEMOS ENTRE TODOS AL PUEBLO HAITIANO. Desde Jerez también

1 comentario:

Laura dijo...

Claro que si, pero que esa ayuda que ahora mueve y conmueve nuestros corazones no quede solo en el terremoto. Haiti necesita de todos antes, ahora y en el futuro.